"No sé si volveré a ser el mejor Rafa Nadal, lo que sé es que voy a darlo todo para intentarlo. Es complicado de analizar en forma positiva después de las lesiones de la temporada pasada y el tiempo que estuve sin competir, a pesar de que hiciese final en Australia y de que ganase el título en Roland Garros".
"Aquí llego con una motivación diferente ya que vengo de una etapa que no ha sido buena para mí. Los últimos siete meses fueron complicados y estuve muy inactivo. Mi motivación ahora mismo es simple: recuperar el tiempo perdido y para ello debo trabajar día a día, y semana a semana".
"Físicamente estoy bien. En Río de Janeiro no creo que hiciese una mala semana, gané buenos partido aunque perdí uno que no debería de haber perdido. También es cierto que el horario del partido anterior fue extraño. Y luego tuve calambres, que casi nunca he tenido en mi vida. Lo cierto es que el rival lo hizo mejor que yo y aprovechó mejor los momentos más límite. Me hubiera gustado ganar allí, pero no se pudo ser".