Rafael Nadal acudió a uno de sus
compromisos publicitarios con Richard Mille, uno de los más importantes patrocinadores del mallorquín. Durante el acto, se pudo ver a un Rafa distendido y relajado jugando a unos de sus deportes favoritos después del tenis, uno de esos placeres que le quedarán cuando se retire de las pistas, cómo él mismo ha declarado en alguna ocasión.
Las imágenes fueron grabadas unos días antes de que Nadal viajase a Basilea, donde disputó el último torneo ATP del año, priorizando finalmente por operarse de su apendicitis.